Los primeros prototipos se instalaron en 1999 y siguen en operación habiéndose extendido su uso a varios países.
En pozos parafínicos o viscosos previene los problemas que se generan de estos dos casos. Es un método netamente preventivo a diferencia de la mayoría de los existentes que son correctivos o paliativos.
Son de baja tensión trifásicos: 380, 440, 480 o 600 o hasta 1000 Volts. Siempre se alimenta con el voltaje disponible en la zona.
Si los equipos son manipulados adecuadamente, la vida útil va a superar los 20 años con creces.
Sí, cualquier rotura puede resolverse en el momento siempre que no sea destrucción total.
En la mayoría de los casos es inferior a 12 meses.
Energía eléctrica y una operación de pulling. Instalación a cargo de personal de Global. La energía puede ser suministrada por línea o generador.
Cualquier problema derivado de la caída de temperatura se corrige inmediatamente. Pudiendo establecerse un cronograma de mantenimiento programado evitando paros por roturas permanentes. También puede acercarse la producción al verdadero potencial del pozo ya que se eliminan restricciones. El resultado particular varía en función de cada pozo.
No, el sistema es simple y práctico, no requiere de herramental complejo. El único elemento particular es la cabeza de pozo que posee un paso de potencia para el equipo.
El equipo se retira junto con el tubing y luego se vuelve a reinstalar normalmente. No hay limitaciones a esta operación.
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